Claudio Prieto nace el 24 de noviembre de 1934 en un pequeño pueblo de la montaña palentina. Su afición a la música se manifiesta ya desde la infancia, cuando acompañaba a un grupo de músicos en su ambular por las fiestas populares tocando la percusión e iniciando lo que sería su primer acercamiento a la literatura musical. Pronto aprendió a tocar la trompeta y pasó a formar parte de la banda Municipal de Guardo, al tiempo que realizaba sus estudios con su director, Don Luis Guzmán Rubio.

 

Prieto comprueba enseguida que las posibilidades de ampliar sus horizontes musicales si permanecía allí eran mínimas, por lo que decide trasladarse a Madrid, concretamente a El Escorial, cuando apenas contaba 16 años. Aquí comienza su etapa de formación con el musicólogo  agustino Padre Samuel Rubio, con el que ya mantendría un contacto permanente a lo largo de su vida, incluidas las visitas a la Universidad y al Monasterio de esta localidad de la sierra madrileña que arraigaría profundamente en su carácter. Esta etapa tendría su continuidad, ya de lleno en el plano de la composición, al ingresar en la Banda de Música Militar de Suboficiales, dirigida por el que sería su tercer maestro, Ricardo Dorado, Simultanea sus obligaciones en la banda con los exámenes en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, consiguiendo el Título de Composición en el año 1957-58.

 

En 1960 obtiene una beca de Intercambio Cultural del Ministerio de Asuntos Exteriores que le permite acudir a los Cursos Superiores de Perfeccionamiento que se impartían en la Academia Nacional Santa Cecilia de Roma, uno de los centros culturales europeos más importantes y prestigiosos. Al terminar el curso, la admiración y el éxito que despierta una de sus composiciones, “Canto de Antonio Machado”, para soprano, y conjunto de cámara, provoca la concesión de una beca de la propia Academia por aprovechamiento del curso, además de premiarle con el estreno de otra de sus obras “Movimientos para violín y conjunto de cámara”.

Permanece becado en Roma hasta 1963, fecha de su regreso a Madrid tras obtener el Diploma de Estudios Superiores de Perfeccionamiento de la Academia. Durante estos tres años fueron sus maestros, Goffredo Petrassi, Boris Porena y Bruno Maderna. En 1967 participó en los Cursos Internacionales de Darmstadt, en Alemania, con los profesores Gÿorgy Ligeti, Karlheinz Stockhasen, Earle Brown etc...

                                                                                                                

Su trayectoria profesional se inicia en Madrid con el estreno en el Ateneo de su obra “Improvisación”, para conjunto de cámara. A este estreno seguiría un encargo de Radio Nacional de España (RNE), materializado en su composición para orquesta “Contrastes”. Pero su verdadero lanzamiento llegaría con la pieza “Solo a Solo”, para flauta y guitarra, premiada en 1969 como la Mejor Obra Española, por Juventudes Musicales y cuya difusión se ha mantenido desde entonces tanto en el ámbito nacional como en el internacional.

                                                                                                                      

A partir de ese momento, su carrera se ve jalonada por importantes galardones, como el Premio de la Radio Televisión Italiana por “Al-Gamara” (1972), el Premio del Sindicato Nacional del Espectáculo por “Nebulosa” (1973), el Internacional Oscar Esplá  (1974), el Sebastián Durón por “Cuarteto I” (1975), el Internacional Manuel de Falla por “Sinfonía 1” (1976), el trofeo Arpa de Oro en el V Concurso de Composición de la Confederación Española de Cajas de Ahorro (CECA)  por “Concierto 1” (1979), o el Internacional “Reina Sofía” por “Concierto Imaginante” (1984), etc...

Prieto conoce y domina cuantos elementos componen el lenguaje musical clásico y contemporáneo. Esta sólida formación le ha venido permitiendo ahondar en la búsqueda de todo tipo de posibilidades, no sólo a nivel de estructura formal sino también a nivel tímbrico, rítmico, etc... pero siempre utilizándolos dentro de las pautas de libertad creadora que tan esencial es para el autor y con la que ha conseguido elaborar una obra  muy personal. Hace uso de tales elementos como vehículos de expresión para sus inquietudes artísticas, que casi siempre responden a una motivación concreta que puede convertirse en una auténtica fuente de inspiración o simplemente en un pretexto descriptivo. Baste recordar ejemplos dedicados a la naturaleza: “Preludio de Verano”, “Cuarteto de primavera”, “Concierto de Otoño” - ;  al factor religioso ; “Primera palabra”, “Hechos de la Pasión” - ; a la referencia histórica : “Pallantia”, “Fandango” “Cuarteto de Alcalá” - ; o a la cultural : “Concierto Mediterráneo”, “Concierto Latino”, “Concierto de Amor”, “Concierto Del Escorial” ...

 

Ha trabajado todo el abanico de formaciones instrumentales, desde las solistas, bien representadas por sus diferentes “Sonatas”, “Turiniana”, “Sones de un percusionista”, “Divertimento”, “Fantasía Balear - ; los conjuntos instrumentales: “Fuego azul”, “La Ruta de Don Quijote”, “Danza Hispana”, “Luna Llena” etc..., hasta la conjunción de coro y orquesta de la que hace gala la “Sinfonía 1” y la “Cantata Manriqueña”- ; pasando por los tríos: “Canto al poeta de los sonidos”, “Trío en Sol”, “Suite Italia” - ; los cuartetos: “Cuarteto I”, “Cuarteto de primavera” - ; o las orquestales: “Nebulosa”, “Catedral de Toledo”, “Sinfonía 2”, “Fandango”, “Concierto Imaginante”,  “Concierto de plenilunio ,  siendo notables las  últimas  obras  para esta formación como la “Sinfonia  4”, “Veredas del tiempo” y  “Manos tendidas”

Sus obras han participado en numerosas ocasiones en la Tribuna Internacional de Compositores de la UNESCO, tal es el caso de “Solo a Solo”, “Catedral de Toledo”, “Concierto I”, o “Sinfonía 2”, y su obra “Fandango” fue seleccionada por Radio Nacional de España (RNE) para la XX Temporada de Conciertos de la Unión Europea de Radiodifusión (UER).

 

Prieto gusta de participar activamente en cuantos eventos se desarrollan en torno a la vida  musical española. Fruto de este interés son sus colaboraciones en aquellas iniciativas que se organizan sobre temas que preocupan a aficionados y profesionales de la música en la actualidad. Ya en 1976 figura como miembro fundador de la Asociación de Compositores Sinfónicos Españoles (ACSE) y desde 1987 como Consejero en la Sociedad General de Autores y editores de España (SGAE),  siendo reelegido en 1989 y 1995, fecha en la cual pasó a ocupar el cargo de Vicepresidente de Música. En 2008 es elegido Presidente del Consejo de Administración de la Mutualidad de Previsión Social de Autores y Editores (SGAE) .

 

También es Consejero de la Asociación Arpista Ludovico (ARLU) y en los pasados años 1993 y 1995, formó parte del Consejo de la Música del entonces Ministerios de Cultura. Por último, a principios de 1996 y dentro de la segunda Asamblea General del CIMUS, celebrada en México D.F., fue elegido Vicepresidente del Consejo Iberoamericano de la Música.

                                                                                                            

Ha sido ponente en numerosos Congresos y Seminarios, nacionales e internacionales y ha pronunciado conferencias en diversas universidades españolas. Es, así mismo, colaborador habitual de algunas publicaciones periódicas y monográficas.

 

En 1994, le fue otorgado el Premio Castilla-León de las Artes, en 1996 el Premio Nacional Cultura Viva por el conjunto de su trayectoria artística y en 1999 se le concedió el Premio El Norte de Castilla, otorgado por los redactores del periódico castellano.

Entre otras distinciones ha recibido la Medalla de Oro y la denominación de Claudio Prieto, para el Instituto de Enseñanza Secundaria de Guardo (Palencia) ; la Medalla de la Diputación Provincial  y la denominación de Claudio Prieto, para la Academia Municipal de Música de Palencia.

 

En 2004  la Academia de las Artes y de la Música, en la VIII Edición de los Premios de la Música,  le concedió el Premio al  Mejor Autor de Música Clásica. Así mismo, la Academia de las Artes y  Ciencias Históricas de Toledo le nombró Académico Correspondiente  en Madrid  2004. La Fundación “Fundepa”, le otorgó el Premio Valores Humanos 2004 por su trayectoria artística. El Jurado de los XV Premios Cultura Viva, le concede el Premio Extraordinario en la especialidad de Música 2006, reconociendo en este galardón la Excelsa Calidad de su Música; el Premio Nacional de Música “Ignacio Morales Nieva 2007” otorgado por la Asociación de Compositores Directores, Intérpretes y Musicólogos (ACoDIM), en la modalidad de composición, por su destacada trayectoria como defensor de la música de creación española, además de profundizar en los valores musicales y ocupar un lugar privilegiado en el panorama musical. En 2011 es nombrado “Miembro de Honor” de la Academia de la Música Valenciana.